Por decisión de la UAR para el regreso a la competencia, una de las clásicas acciones del rugby será modificada y hay un fuerte rechazo en el ambiente, ya que se afecta a la práctica habitual de la disciplina.
La Unión Argentina de Rugby les comunicó a las diferentes federaciones provinciales que habrá un cambio de reglamento para el scrum, una de las clásicas jugadas de este deporte.
Después de un año y medio sin actividad por la pandemia, el rugby nacional volverá a las canchas en abril pero con algunos cambios en el juego, según les informó el Área de Competencia y Desarrollo de la UAR a las uniones provinciales.
El cambio más significativo es que la formación (el scrum) será simulado, se jugará con la modalidad “tira y saca” sin oposición para aquel equipo que tenga la posesión de la pelota, es decir que no habrá empuje entre las formaciones.
La medida fue establecida para todas las divisiones, desde los menores de 15 años hasta la división de mayores, y será adoptada en los partidos locales amistosos que se jueguen antes del reinicio de la actividad y en los campeonatos oficiales.
Antes de introducir la pelota se deberán lograr los tres tiempos indicados para el enganche; los jugadores deberán estar en posición de empuje y el scrum deberá estar estable.
Durante la introducción, ambos equipos deberán realizar un ejercicio isométrico para mantener una postura correcta pero no habrá empuje, y el equipo que introduce la pelota debe hookearla. En caso de que no lo hiciera el juego se reanudará con un free kick a favor del equipo que no introdujo la pelota. No se podrá pedir scrum como opción.
Ese free kick no se podrá jugar hasta que el equipo defensor tenga un tiempo razonable para posicionarse. La pelota deberá jugarse fuera del scrum, una vez disponible, antes de los cincos segundos y no habrá reseteos de scrum.